Cuando parecía que ya no había esperanza para el fútbol de ataque, que el doble pivote, el trivote, el músculo y la presión eran imprescindibles, Rijkaard se saca de la manga el ADN del 'fútbol total', y a pesar de las críticas recibidas por sus últimas decisiones tácticas, el Barça se marca una primera parte de toque y control, con dos goles 'sencillos', sin los alardes del domingo frente al Bilbao.
El gol de Xavi; pared, caño y definición.
La 'mala noticia' es la eliminación del Arsenal, pero claro, es que el gol de McCarthy es para guardar.
Y no, no hablaré de la panda de salvajes del derby sevillano, que ya hace años que dejó de hacer gracia; precisamente, esas risitas y condescendencia con cada imbecilidad de Lopera y cada algarada de Del Nido han sido el caldo de cultivo que han culminado en lo que ha pasado hoy.
Un Hamburgo v Kaiserslautern para volver a la élite
Hace 20 horas