Cinco en 37

En el minuto 37 el Barça ya ganaba 5-0, hat-trick de Eto'o incluido. Tercera goleada en cuatro partidos y ya no valen las excusas de que el rival es flojo, sale dormido, se queda con diez o que el partido se encarrila pronto. Han sido 18 goles a favor y uno en contra, toda una demostración de ambición ejemplificada en la presión constante de Eto'o, que físicamente vuelve a ser el de antes de la lesión de Bremen (y de eso hace ya dos años). Ahora sólo queda ver qué hacen los equipos rivales porque si salen a jugar al fútbol corren el riesgo de salir goleados, y si se encierran atrás también. La velocidad del balón y las apariciones de la segunda línea son prácticamente indefendibles, los constantes cambios de posición de los delanteros y los centrocampistas marean, el estado de gracia de Messi es permanente -parece que ningún defensa ni ningún sistema defensivo puede pararlo-, la puntería de Eto'o para abrir la lata vuelve a ser infalible, y Xavi e Iniesta siguen haciendo lo que siempre han hecho pero a velocidad x2. Para rematar la faena, Alves cierra la semana con su primer gol después del pase que se marcó en Basilea. Y aún así lo mejor es que Guardiola sigue ejerciendo de guardián de la euforia.

Dejo el gol de Alves, por ser su primero con la camiseta del Barça y por sus reminiscencias wembleyanas (por seguir con las comparaciones con el dream team de Cruyff).