El Balón de Oro

Ha empezado una campaña en Barcelona a favor de Messi para el Balón de Oro. Entiendo que la gente, a título individual, tenga sus preferencias, filias, fobias, manías y excentricidades (igual yo le daba el trofeo a Cesc y me quedaba tan ancho). Pero que los medios de comunicación remen a favor de uno o de otro de forma oficial no acabo de entenderlo.
Además, para mí, Cristiano Ronaldo es el único favorito aunque dejara de jugar por lesión hasta que se falle el ganador o decidiera marcar goles en propia puerta por la escuadra; no recuerdo ningún no-delantero-centro marcando más de 40 goles y llevándose liga y Champions, siendo decisivo y marcando gol en la final. Se me dibuja una sonrisa en la cara cuando veo como se valora la medalla de oro de los JJOO de Messi frente a todo lo conseguido por el portugués y como se destaca de este último que no llegara lejos en la Eurocopa, como si caer ante Alemania en cuartos fuera lo mismo que golear al Brasil semi sub-23 de Dunga.
Pero el problema no es ese, el problema es que si Messi vistiera de blanco los diarios de Barcelona no lucharían por su candidatura: tan simple, obvio, descorazonador y poco futbolístico como eso.
Ya sé que no descubro nada pero es que me pone de mal humor lo cazurra y miope que puede llegar a ser la prensa deportiva autóctona.