¿Qué es mejor? ¿Una buena jugada que acaba en gol o una buena jugada que acaba con una buena parada del portero? En la primera se logra el objetivo final de toda jugada, pero la segunda implica que todos los participantes han hecho bien su trabajo, unos lo intentan (aunque por poco no lo consiguen) y otros lo impiden.
Como todo lo que no es un gol se olvida rápidamente (¿alguien recuerda ahora las 2-3 paradas de César en el Bernabeu?) he decidido que de vez en cuando caerán algunas palomitas, unos contra uno, manos cambiadas y demás.
Que vistan diferente, sus errores se traduzcan en gol seguro y otros inconvenientes del cargo no quiere decir que no merezcan salir por aquí.
Os dejo con un Juve-Man Utd, control y volea de Zidane y parada de Smeichel (¿por qué no se dice abiertamente que Zidane es ambidiestro?, chuta más veces con la izquierda que con la derecha).
Florece la Serie A
Hace 1 día
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