Actitud

Si algo ha ganado el Barça en los últimos tiempos es actitud; antes del empate de Xavi había caras de cabreo y mala ostia, algo que, por ejemplo, no se veía en los tristes empates de hace no mucho. Algo ha cambiado, no sé el qué, pero se sigue demostrando que el 50% de casi todo son las ganas; el resto queda para el talento y la preparación. Da igual que sigan empecinados en entrar por el centro, que las bandas estén de adorno, que Messi encare a cuatro a la vez y que, por una vez que Rijkaard hace un cambio doble con cierto desparpajo, se despisten y encajen un gol. Todo queda compensado por el acoso y derribo, el atrevimiento a seguir intentándolo todo y llegar al minuto 93 al galope con cuatro jugadores dentro del área.

Y como digo en el Twitter, el Valencia ha dado lecciones de cómo jugarle a un grande un partido de ida en su casa. Maduro, Banega, Mata, Villa, Silva e incluso Joaquín se han matado a defender y salir hacia adelante a la mínima. Mención especial para Hildebrand, que lo ha sacado todo -en el gol viene de parar un tiro a bocajarro de Eto'o-.

Yo voy reservando las palomitas para el partido de Mestalla, que pocas veces se juntan el talento y las ganas sobre un campo de fútbol (a la indolencia de la Roma me remito).