No es el gol de la semana, pero soltar dos recortes antes de centrar y bajar con el pecho un balón que se podía rematar de cabeza, en pleno tiempo de descuento, para ganar el partido y dejar a la Juve (tercera) a doce puntos, son muestra de un equipo enchufado y con ganas -algo no muy habitual en el Inter-.
Isak alcanza la tierra prometida
Hace 1 día
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